El sábado 14 de abril se llevó a cabo la jornada denominada “Jóvenes Vistan el Seminario”. Fue la octava edición de un evento que convoca a centenares de jóvenes de la ciudad de Rio Cuarto, zonas aledañas, pueblos y ciudades de nuestra diócesis, Villa María y La Pampa.

La idea central de esta jornada es que el Seminario Jesús Buen Pastor de Rio Cuarto sea el punto de encuentro para que los jóvenes de la diócesis, y de otros lugares, conozcan el seminario, interactúen entre ellos, generen lazos de amistad entre colegios, grupos de iglesias, barrios y pueblos. Y sobre todas las cosas se encuentren con Jesús Buen Pastor.

El evento comenzó alrededor de las 8:30 de la mañana en donde se recibieron a los jóvenes que llegaban de diferentes parroquias, colegios, grupos juveniles. Bajo el lema y canto de “Vengan y lo Verán” los chicos se animaron a bailar y ponerse en movimiento acompañados por la banda local del seminario. Mientras deleitaban el desayuno.

El padre rector de nuestra casa, Roberto Ferrari, fue el encargado de dar la bienvenida a todos los presentes animándolos a que conozcan el seminario, la casa dónde se forman los futuros pastores.

Luego fue el momento de realizar talleres de formación en donde se dividió a los jóvenes en tres grupos de acuerdo a las edades que iban a partir de los 16 años hasta los 22-23 años. La temática de cada uno de los talleres fue que los jóvenes aprendan la importancia de su rol y compromiso en la comunidad que viven, ya sea en el ámbito de la familia, escuela, parroquia, club, grupo.

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Inmediatamente se llevó a cabo la adoración eucarística, en la cual los jóvenes se mostraron predispuestos a la oración y al encuentro personal con Jesús Eucaristía.

Después del almuerzo, fue el momento de ocio en donde los presentes disfrutaron de juegos y animaciones organizadas por los seminaristas. También se escucharon testimonios vocacionales de consagrados, matrimonios y seminaristas.

El evento finalizó con la Santa Misa presidida por el obispo de Rio Cuarto, Adolfo Uriona, en donde destacó que: “Esto que estamos haciendo ahora debe llevarnos a ese encuentro profundo de corazón a corazón con Jesús”. Y además agregó: “el encuentro con Jesús nos lleva inmediatamente a darlo a conocer a los demás”. Sostuvo el prelado.

Con respecto a convocatoria de jóvenes, el obispo manifestó que es una buena iniciativa este encuentro para escuchar a los jóvenes, saber sus necesidades, y que sepan que el seminario no es un lugar extraño, sino, que es un sitio dónde hay personas normales que se quieren entregar a Dios.

Antes de la bendición final el padre formador, David Cabral, cerró el encuentro diciendo que: “Dios habla al corazón, Dios llama y nos llama a todos, a unos a ser sacerdotes, a otros religiosos, religiosas, a otros al matrimonio, a otros a ser laicos. Y también recordó la pregunta del centro de este encuentro que es la que hace Jesús: ¿Qué quieren?” e invitó a los jóvenes a que sigan respondiendo esa pregunta y continúen transmitiéndolas en sus comunidades.

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