Nuestra Casa Celebró Su 75° Aniversario Con Una Gran Misa
El lunes 2 de abril se llevó a cabo la Misa de Acción de Gracias por los 75 años del Seminario Jesús Buen Pastor. La ceremonia fue presidida por nuestro obispo, Adolfo Uriona, en el patio central del propio seminario diocesano.
Con la presencia de más de 500 personas que llegaron de diferentes puntos de la diócesis y del país se dio comienzo a los festejos por los 75 años de nuestra casa formadora. A media mañana, en un día fabuloso con sol radiante, nuestro obispo presidió la eucaristía en la que concelebraron los obispos de diócesis vecinas, 52 sacerdotes y 4 diáconos. Entre los obispos que se hicieron presentes estuvieron: el Arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, el obispo de San Francisco, Sergio Buenanueva. El obispo de Quilmes, Carlos Tissera y el obispo de Cruz del Eje, Ricardo Araya.
Monseñor Uriona, en su reflexión, recordó con un gesto de gratitud a sus obispos antecesores; Buteler y Blanchoud quienes fueron los encargados de comenzar y reinaugurar esta casa respectivamente. “La concreción de esta obra posibilitó la formación de un importante número de sacerdotes que se entregaron a pastorear las muchas necesidades de esta vasta diócesis del sur de Córdoba. A raíz de los vertiginosos cambios del post concilio fue cerrado por monseñor Blanchoud en 1966 y más tarde reabierto por el mismo obispo en 1982 con el nombre actual de Jesús Buen Pastor”. Expresó nuestro obispo.
Con motivo de los 75 años del seminario, nuestra diócesis ha decretado el corriente año como “año vocacional”, motivo por el cual, el obispo aprovechó la oportunidad para pedir a todos los congregados que “recemos por las vocaciones y trabajemos por ellas”. Y agregó: “que todos nos sintamos responsables, cada uno desde su lugar, de cuidar el seminario que sin dudas es el corazón de la diócesis”.
Antes de la bendición final, llegó el momento de que nuestro rector, Roberto Ferrari, comunicara unas palabras a todos los presentes. El padre Roberto expresó su gratitud diciendo: “¡Cuánta historia! ¡Cuánto por agradecer a Dios! Y a Monseñor Buteler”-al cual pidió un fuerte aplauso.
También manifestó su agradecimiento a la Congregación de los Misioneros de los Sagrados Corazones de Jesús y María de Mallorca, España. Cuyo representante, el provincial Daniel Echeverría, presente en la ceremonia, también se llevó todos los aplausos. Al igual que tantos sacerdotes, profesores, ex formadores, ex rectores, que con su trabajo y aporte, escribieron la historia de esta casa de formación.
En cuanto a la formación, nuestro rector rememoró que: “El seminario se gesta bajo el pontificado de Pio XII, de quien monseñor Buteler va tomando sus lineamientos. Y fue creciendo a la luz y con la impronta de un Vaticano II, de Puebla, de las líneas pastorales, de Aparecida y del papa Francisco. Y ahora con la nueva Ratio, las nuevas normas de la formación sacerdotal”.
Y para finalizar afirmó que: “Estamos comenzado un tiempo hermoso para los seminarios de Argentina y del mundo y con el deseo de seguir navegando mar adentro en nuestra Patria. Tenemos que seguir formando pastores del pueblo de Dios a ejemplo de Cristo servidor, Pastores con celo misionero, predicación evangélica y vida pobre y entregada como nuestro Santo Cura Brochero”.
Terminados los ritos litúrgicos, el obispo, junto a todos los concelebrantes se dirigieron en procesión hacia la imagen de Nuestra Señora de Fátima ubicada en el patio central en donde entonaron el Regina Coeli con ánimo festivo y gozoso para dar lugar al almuerzo en Club Banda Norte.
